Después de asistir a un Encuentro en PentaDama (Asociación que presido), tendré el honor de compartir, junto con otros tres amigos, (José González, Eva Cámara y Mónica Tranque) escenario con él.
Tuve la suerte de coincidir con él en algunas ocasiones y de conocer su generosidad y belleza humana. Hace unos años escribí este poema para el libro homenaje que mi querido Antonio Marín Albalate coordinó. Gracias Pablo, por tu generosidad para conmigo y con mi poesía.
PABLO GUERRERO (De la caverna a
la ternura)
Al borde de un cuerpo de bardo de alma y cielo
asomó una voz de aire, de mar y de tierra.
Apretaba en su bolsillo
una almohada de sueños mientras cantaba,
obligando a anidar una sorpresa
en mis oídos.
Una hiedra se creció desde sus pies
hasta mi cuerpo estremecido.
Me envolvió una melodía que nacía
de una caverna ronca y oscura ,
pariendo una ternura de niños
en veranos de trigo y semilla.
Y las nubes que le llovieron en la cabeza
se convirtieron en palabras
cargadas de sal, de mar, de esperas,
en ese estío inicial en el que
oí como agitaba su mano de poesía.
Al borde de un escenario conocido y desnudo
asomó un ser de agua, cargado de dulzura y recuerdos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario